En el mundillo del análisis sobre todo lo relacionado al mundo fútbol, no se puede obviar lo que tiene que ver con la estética del jugador. En ese sentido, de un tiempo a esta parte, vemos cómo son los futbolistas quienes van marcando tendencias, por ejemplo, en cuanto a nombres de los niños; Ahora tenemos abundantes Lioneles, por Messi. O Cristiano y un lustro más atrás, nos habíamos llenado de Ronaldos y también Romarios. Ni hablar de los Diegos Armandos que hay entre los muchachos que nacieron entre 1986 y 1990.
Sin embargo, hay otra camada de jugadores que si bien dejaron su huella -o siguen activando en lo relacionado al fútbol- simplemente no tendrán la suerte de encontrarse con una mamá en un super y que le diga “Vos sos (o eras) mi ídolo y por eso mi hijo lleva tu nombre”.
En este pequeño Top de lo que consideramos los nombres más feos que aparecieron últimamente en el fútbol local, te presentamos a quienes consideramos que sus padres le jodieron la vida, pero que supieron salir adelante a pesar de sus nombres (?). Ellos son:
7) Aquilino Giménez : Con 19 años, debutó en el Olimpia en el 2012 con José Saturnino Cardozo, en un momento un tanto difícil para el equipo decano. Buenos partidos y un perfomance más que aceptable, le sirvieron para que se mantenga en el plantel. Una mezcla de Aquiles y Lino (?), este buen lateral derecho franjeado después fue cedido al Sportivo Luqueño para la presente temporada, en donde alterna cada tanto en el equipo principal.
6) Casiano Delvalle: Este vino con combo; Casiano Wilberto Delvalle y mejor no hacer juego de palabras con su nombre, habrá sufrido mucho ya en su niñez (?). De hecho, su nombre nos recuerda a una sidra (?) que se consumía en los 90. Brilló en Sport Colombia y luego se hizo querer por la hinchada franjeada a fuerzas de goles. Itinerante del fútbol, estuvo por Chile, China y Japón, para después volver cerca del 2002 a nuestro país para defender los colores del Sportivo Luqueño.
5) Aureliano Torres Román: Surgido del super Deportivo Recoleta, rápidamente recayó en Guaraní, donde supo ganarse un lugar con Anibal “Maño” (te odiaremos siempre) Ruíz. Trotamundos de este juego, Aure se hizo lugar a pesar de su nombre en el fútbol argentino (?), en donde fue campeón con el San Lorenzo de Tinelli. Número puesto en la Selección, fue mundialista y copaAmeriquista (?) con el Tata Martino varios años. En Peñarol de Uruguay también gozó del campeonato y ahora está de vuelta en nuestro fútbol, defendiendo como capitán los colores del Sol de América.
4) Hilario Bernardo Navarro Ruiz Díaz: Lo de Bernardo podría ser cool, de acuerdo de cómo se pronuncia (?), pero Hilario no zafa ni con garrote. Oriundo de Corrientes, llegó al fútbol paraguasho para incorporarse al Guaraní para la temporada 2001, en donde empezó a dormir en el hospedaje del club bajo las graderías, según él mismo contó. Una vez consolidado, pasó a Cerro Porteño, en donde tuvo algunas que otras buenas actuaciones.
Del Ciclón, fue transferido al convulsionado Rácing de Argentina, en donde se destacó y fue figura en muchos partidos. Poco después, los hinchas de Rácing le cantaron “Hilario, el mercenario” cuando fichó por Independiente, club con el que ganó la Copa Sudamericana en 2010 y hasta pidieron por él para la selección argentina. Claro, no sabían que luego se iría a B con el Rojo, en donde todavía sigue calentando banco.
3) Patrocinio Samudio: Así, a secas. Patro no quiere saber nada de segundos nombres ni apellidos. Tómalo o déjalo, mujer (?). Este rudo central se inició en Presidente Hayes en 1997 y al año siguiente ya saltó a Guaraní, en donde se mantuvo un par de temporadas.
Recorrió varios clubes de nuestro país, como Nacional, el Universal de Encarnación, 12 de Octubre de Itauguá, River Plate (el Kelito), Fernando de la Mora, pero fue realmente en el famoso Tacuary de Francisco Mourinho Ocampo en donde fue alma y corazón de esa defensa Mourinhocampeniana (?). Jugó 4 temporadas en el Tacua, hasta que después del descenso, siguió su carrera en el 2 de Mayo de Pedro Juan Caballero.
2) Troadio Daniel Duarte: TDD (?) surgió de las inferiores de Guaraní, sin embargo fue en Sol de América en donde se hizo notar con mayor fuerza en el fútbol local. Posteriormente estuvo en Luqueño y logró una transferencia al San Lorenzo de Tinelli, en donde duró menos de lo que dura una separación en sílabas de su nombre (?).
Volvió a Paraguay para hacerse amo y señor del mediocampo nacionalófilo, en donde brilló durante tres temporadas, consiguiendo un título. Fue transferido al Barcelona (de Guayaquil) para la temporada 2008 y luego siguió jugando en Ecuador en otros equipos por un par de años más. Volvió a Paraguay, como todos, para ir despidiéndose de su carrera. Integró la plantilla del 3 de Febrero en el 2011.
1) Floro Marino Duré : Todo lo que se pueda decir, queda corto. ¿Qué pensaron los padres?, ¿Fue un castigo antes de que nazca?, ¿Acaso quisieron vengarse por algo no planeado?. En fin, preguntas sin respuestas sobran.
Lo concreto con Floro Marino es que se la jugó. Y encima de arquero, un puesto muy difícil y que se presta para las cargadas fáciles. “Qué lo vengan a ver.. qué lo vengan a ver.. este no es un arquero es una planta de Ypané” (?) le podían haber cantado las barras rivales. Pero no escatimó esfuerzos y llegó.
Fue arquero de varios equipos de Primera durante varios años entre finales de los 90 y principios del nuevo milenio (?). Llegó a jugar partidos internacionales con el 12 de Octubre de Itauguá y también con Colegiales! (leer con voz de Gabriel Gabo). Sin embargo, en 2008, fue sacado del 12 y su relación con el conjunto itaugüeño murió. Fue a defender equipos en la Intermedia, siendo el Sportivo Iteño en donde más se destacó.
Desde este año, es uno de los profesores de la escuela de fútbol “las águilas” en donde a todos los niños les entrena para ser grandes arqueros, pero el requisito es tener buenos nombres (?).
Y nos vamos con 2 Bonus imperdibles:
* Aproniano Dedicación Santacruz : Papá, manager y malcriador (?) de Roque Santacruz. Apro fue también futbolista, en los albores de los 70, jugando para el Capitán Figari, de Lambaré, equipo con el que llegó a la entonces “Primera A”.
* Lilio Torales: Cualquiera diría que es un prócer paraguayo, pero no. Es un jugador, rápido y juguetón (?) que brilló en Colegiales y también hizo de las suyas en Cerro Porteño, a principios de los 90.
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