Un equipo que pierde a uno de sus miembros siempre tendrá un vacío imposible de llenar, especialmente si ese miembro es la estrella y líder del mismo. Esta es la situación de la selección de Ecuador, quienes lograron clasificar al Mundial, pero antes perdieron a Christian “Chucho” Benítez. Este torneo será una ocasión para que sus compañeros puedan homenajearlo dignamente, pero tendrán que demostrar que tienen permiso de ganar fuera de su estadio.
Historia
Para evitar ser malos con la historia del fútbol ecuatoriano, iniciaremos el recuento desde finales de los años 80, cuando apareció el hombre que transformaría a la selección de ser una máquina de derrotas a ser un competidor feroz: Dusan Draskovic. Este técnico yugoslavo (en aquella época) se puso la meta de recorrer todo el país buscando talentos en todos los lugares ignorados del país, especialmente las zonas montañosas, dejadas de lado por los “costeños”.
La espina dorsal de los planteles exitosos estuvo compuesta por jugadores encontrados en este viaje, varios de ellos de la región del río Chota. Al igual que muchas personas, solo al descubrir Chota la selección ecuatoriana pudo salir del pozo en el cual se encontraban y estar al mismo nivel de los grandes y poderosos.
En las eliminatorias de los 90 ya empezaron a demostrar cuanto avanzaron, y finalmente llegaron a clasificar a un Mundial en 2002, dirigidos por Hernán “Bolillo” Gómez. Al ser su debut tuvieron pánico escénico y fueron eliminados en fase de grupos, pero lograron vencer a Croacia para por lo menos tener algo recordar aparte del viaje a tierras asiáticas. Bueno, tampoco era muy fácil poder vencer a Italia y México.
Repitieron la clasificación para Alemania 2006, donde si dieron una muestra de su nivel, eliminando a Polonia y cayeron ante Inglaterra en Octavos de Final. Hasta ahora odian a David Beckham por el tiro libre que les convirtió en aquel partido (también por ser un figuretti marketinero, pero por eso lo odiamos todos). Tras este Mundial estuvieron en una etapa dura de recambio, de la cual el equipo no pudo recuperarse y no pudieron ir de paseo a Sudáfrica.
Los enfrentamientos entre Ecuador y Paraguay son bastante particulares, ya que en las últimas 5 eliminatorias casi siempre gana el equipo local por goleada. Paraguay además tiene la mala suerte que siempre empieza ganando los partidos en Quito, pero enseguida la altura y la velocidad de los ecuatorianos les pasan por encima. Vale la pena recordar el único gol del gran Richart Baez en eliminatorias:
En el camino a Brasil se aprovecharon de su mayor ventaja: la altura de Quito. Los 7 partidos que lograron ganar fueron de local y todas sus derrotas de visitante. Desde 2009 que no ganan un partido oficial de visitante. Terminaron clasificando apenas por encima de Uruguay gracias a su diferencia de goles. En el sorteo les tocó el grupo E, enfrentando a Francia, Suiza y Honduras.
La muerte del “Chucho”
Es imposible analizar a esta selección sin mencionar el impacto que tuvo la muerte repentina y trágica de Christian “Chucho” Benítez, quien murió de un infarto en Qatar tras pasar varias horas sin ser atendido por una peritonitis. “Chucho” era considerado el alma del equipo, el jugador diferente que siempre daba todo por su selección. Tan grande fue su influencia que decidieron retirar el número 11 de la selección para siempre, como una forma de rendirle homenaje, aunque tendrán que usarla en el Mundial por el reglamento.
El equipo tuvo un bajón anímico importante, perdiendo varios partidos pero pudieron recuperarse a tiempo para salvar su clasificación. Perdiendo a Benítez se quedaron sin un jugador que verdaderamente haga la diferencia en la delantera, y que pueda unir el mediocampo y el ataque.
Técnico
Al frente de “La Tri” está otro de los colombianos que ha estado dando vueltas por diversas selecciones de Centro y Sudamérica: Reinaldo Rueda. Llegó a Ecuador en 2011, luego de haber clasificado al Mundial de Sudáfrica al mando de la selección de Honduras, a quienes enfrentará en fase de grupos. Lo trajeron porque el equipo solo ha clasificado a Mundiales con 2 técnicos colombianos.
Rueda es un técnico no muy querido en el país, debido a que no ha tenido tanto éxito como sus predecesores, “Bolillo” Gómez o Luis Fernando Suárez (coincidentemente ahora D.T. de Honduras) y muchos piensan que solamente ha logrado ganar gracias a la altura de Quito. Tampoco le ayuda que no es tan carismático ni simpático como sus antecesores.
Táctica
El estilo de juego de Ecuador nos remonta a aquellas viejas épocas donde el famoso “win tata” era jugador fundamental e obligatorio en los esquemas de los equipos. Su juego está enfocado casi exclusivamente en un desdoble rápido de defensa a ataque y causar estragos por los costados, debido a que sus 2 jugadores más talentosos y desequilibrantes son también sus extremos: Antonio Valencia (Manchester United) y Jefferson Montero (Morelia). Pueden jugar o 4-4-2 o 4-3-3, pero sea el esquema que usen la pelota siempre irá desde el costado para el área. En el caso que los rivales sepan cerrar los carriles, el equipo está en problemas.
El mayor problema de este esquema es que como atacan mucho por los costados, estos mismos costados quedan libres para el ataque del rival, porque no les da el tiempo para cubrir toda la cancha. No les queda otra más que jugar un estilo de ataque incesante porque su nivel defensivo es deplorable.
Plantel
El encargado de mantener al equipo a buen nivel tanto en lo deportivo como en lo anímico es el ya mencionado Valencia. Fue nombrado capitán por ser el único que juega en una liga de primer nivel y por ser el mejor amigo de “Chucho”. Su despliegue por derecha es una fuente de peligro constante y necesario para que todo el planteamiento funcione.
Los ecuatorianos esperan que sus rivales no se den cuenta que su sector defensivo no da ni para defender en un partido de cuarta división. Su mejor central. Jayro Campos, está fuera por lesión. Los que sí están disponibles, Frikson Erazo (Flamengo) y Jorge Guagua (Emelec), juegan a un nivel digno de torneo de ex alumnos, al punto que Erazo a veces ni siquiera es convocado en su club de tan mal que está jugando. Walter Ayoví (Pachuca) es el más experimentado de la defensa y será su referencia.
El encargado de contener la zona ignorada del equipo, el mediocampo, es Christian Noboa (Dinamo Moscú), a quien le dio neumonía por haber comido nieve al llegar a Rusia. Él es quien distribuye las pelotas a los extremos y se toma el tiempo en bajar un poco el ritmo, algo necesario en un equipo que quiere vivir corriendo sin parar los 90 minutos. Junto a él debía estar Segundo Castillo (Al-Hilal), pero gracias a la entrada violenta de Luis Montes en un amistoso a 12 días del Mundial no se sabe si podrá jugar. Montes también ligó su parte, con fractura de tibia y peroné.
Al lado izquierdo está su jugador más enigmático y desequilibrante: Jefferson Montero (Morelia). Hasta hoy en día Iván Piris tiene grabada la 9 en la parte de atrás de la camiseta de Montero de tantas veces que tuvo que perseguirle en aquel partido que se jugó en Quito.
Adelante tienen a 2 delanteros con características diferentes: Felipe Caicedo (Al Jazira) es el grandote encargado de bajar las pelotas y cabecear y Enner Valencia (Pachuca) es el jugador veloz y hábil para entrar al área y definir. También tienen al “Neymar ecuatoriano”: Fidel Martínez, conocido más por sus peinados que por sus logros futbolísticos.
El mayor problema que tiene este plantel es la falta de competencia de nivel. Casi todos juegan en ligas donde defender es un pecado y los goles llegan regalados, como la liga mexicana o las del Medio Oriente.
Perfil del hincha
Los hinchas ecuatorianos, como buenos sudamericanos, tienen el fanatismo a flor de piel, a tal punto que dispararon al técnico de la selección en 2001 por no convocar al hijo de un ex presidente. Al verse fuera de su coliseo imbatible, el Atahualpa de Quito, la hinchada tiene más obligación que nunca de apoyar y dar muestra de su pasión en las gradas. Si Los Conquistadores, creadores de uno de los mejores videos musicales de la historia, van a Brasil todas las bodegas estarán de parabienes, ya que sin dudas venderán cientos de litros de cerveza y licores varios. Aquí presentamos su himno a los “chupadores”, que seguro identifica a todos los que están leyendo esto:
https://www.youtube.com/watch?v=ehlVhuy0aG8
Los paraguayos debemos sentirnos identificados con los ecuatorianos debido a que entendemos la situación que viven con la muerte de “Chucho” Benítez. Esta situación es casi idéntica a la trágica historia de Salvador Cabañas: un delantero quien era el eje y símbolo del equipo dentro y fuera de la cancha sufre una situación fatídica. Por fortuna Cabañas pudo sobrevivir al balazo que recibió en la cabeza, al contrario de lo que ocurrió con Benítez.
Conclusión
Al no poseer tecnología que les permita levantar los estadios a 2.500 metros, Ecuador se encuentra ante una situación bastante complicada. No le tocó uno de los grupos más difíciles, pero Suiza es mucho más fuerte que aquella selección de Polonia en 2006 y Francia llega con un equipo muy joven y potente para enfrentarlos. De cualquier forma pasar la fase de grupos ya será un gran logro para ellos. Su mayor obligación, aparte de cumplir con sus hinchas, es dar un merecido tributo a aquel jugador irreemplazable que siempre representó con orgullo a su país en todos los equipos que jugó y en especial a su selección.