El partido de la vergüenza: Sol de América-Olimpia, Copa Libertadores 1989

Es difícil aceptar que en muchas ocasiones los partidos de fútbol están arreglados. Sea por cuestiones de apuestas, los incentivos a equipos contrarios, los arreglos que benefician a ambos equipos, todos ellos significan una violación de la creencia del hincha que los equipos siempre entran a una cancha a competir y buscar la victoria de manera honesta.

Hasta hoy en día uno de los partidos que más ha sido apuntado como un arreglo fue el que disputaron Olimpia y Sol de América en la Copa Libertadores de 1989. Es facil entender por qué, tomando en cuenta que no es común que coincidan un apagón que postergue un partido y que justamente se cumpla el resultado casi imposible que necesitaban ambos equipos para clasificar: un 5-4. Esto fue lo que pasó entre el 29 y 30 de marzo de 1989.

El camino al arreglo

Escenas del partido a la noche. El supuesto arreglo continuaría al día siguiente (ABC Color)
Escenas del partido a la noche. El supuesto arreglo continuaría al día siguiente (ABC Color)

En la Copa Libertadores de 1989 los dos equipos paraguayos que habían clasificado fueron Olimpia y Sol de América. En aquellos años la Liga Paraguaya aplicaba un formato donde uno debía ser experto en cálculo para descifrar quienes eran los primeros, con 3 ruedas preliminares y una final, que incluía puntos de bonificación por las rondas anteriores. Olimpia fue el campéon y el segundo lugar fue para Sol de América, a pesar que estos últimos solo ganaron 1 de 7 partidos, con apenas 3 goles a favor, todo gracias a la bonificación acumulada.

Ambos equipos tenían a dos de los mejores entrenadores que hayan pisado nuestro suelo: el glorioso Luís Cubilla en Olimpia y Sergio “Pingüino” Markarian en Sol. Sus equipos debían enfrentar aquel año a los representantes chilenos en la Libertadores: Colo Colo y Cobreloa. Todos los partidos fueron una lucha encarnizada, donde cada plantel dejaba la vida en la cancha y en donde la localía se hizo sentir. Este nivel se mantuvo parejo hasta la última fecha, a la cual llegaron en estas posiciones, siendo los primeros tres los que pasarían de ronda.

  1. Cobreloa: 7 puntos, 5 GF, 2 GC
  2. Olimpia: 5 puntos, 4 GF, 4 GC
  3. Colo Colo: 4 puntos, 5 GF, 6 GC
  4. Sol de América: 4 puntos, 2 GF, 4 GC
Abc Color no se anduvo con vueltas con respecto a este partido.

El resultado que más convenía a los equipos paraguayos era que pierda Colo Colo, así clasificaban con un empate. Cobreloa aseguraba su clasificación con un empate o una victoria, ya que cuando eso los triunfos solo sumaban 2 puntos. Si ganaba Colo Colo podía clasificar Olimpia con una victoria y un empate dependiendo de la diferencia de gol y Sol de América con una victoria también dependiendo de la cantidad de goles. Si Colo Colo empataba los equipos paraguayos podían avanzar si se daba un resultado: un triunfo de Sol por un gol de diferencia, la cantidad de goles que necesitaban dependería por cuanto empataban los chilenos. Si Sol ganaba por más de un gol quedaba eliminado Olimpia por diferencia de goles.

El miercoles 29 de marzo era el día que se había fijado para ambos enfrentamientos, que supuestamente se darían a la misma hora, pero en realidad el partido entre los chilenos se jugaría un poco antes. En ambos países se hablaba sobre un arreglo, con un triunfo de Sol y un empate en Calama, porque un empate con muchos goles también convenía a los chilenos.

Un conveniente apagón

Olimpia y Sol no jugarían su partido en el Defensores del Chaco porque había sido suspendido por incidentes en los partidos anteriores, así que se enfrentarían en la cancha de su gran rival Cerro Porteño. El ambiente no era uno de tensión, sino de tranquilidad, como si la propia gente ya asumía que estaba todo bajo control.

Momento que el árbitro Barrientos suspende el partido por falta de luz para continuar al día siguiente (ABC Color)
Momento que el árbitro Barrientos suspende el partido por falta de luz para continuar al día siguiente (ABC Color)

El partido comenzó con un dominio de Sol, quien abrió el marcador con un gol de Victor Genes, quien en ese entonces no se dedicaba a encerrarse atrás sino a atacar incesantemente. Según el periodista de ABC Robert Singer (si, el mismo Singer de los comentarios y los chistes hoy en día) un hincha de Sol le dijo “viste, ahí ya vino el primero”. Ambos equipos continuaron atacando hasta que a los 25 minutos explotó un transformador en la Olla y empezó a fallar la lumínica. El árbitro Estanislao Barrientos esperó 15 minutos, pero como no volvía la luz, decidió suspender el partido. Llamativamente a poco de anunciar la suspensión volvió la luz.

Según dijo Hugo Brizuela, talentoso delantero de Sol que jugó aquel día, hubo una feroz tormenta que causó el apagón, pero la crónica del día solo habla de una “tenue llovizna”, quedando descartada la teoría que era imposible jugar debido al clima aquella noche. El árbitro Barrientos también se contradijo posteriormente, mencionando que esperó una hora para que vuelva la luz, cuando en realidad solo esperó 15 minutos.

Tras una reunión entre el árbitro, el veedor de la Conmebol y los equipos, se decidió que el partido se iba a jugar al día siguiente a las 5 de la tarde. Para ese entonces ya sabían que el resultado en Calama terminó 2 a 2, con un gol en el último minuto de Cobreloa para empatar. Con este resultado Sol debía ganar 5 a 4 para que Olimpia pueda tener más goles a favor que Colo Colo y también más goles de visitante para poder pasar así de ronda.

La tarde de los goles

El primero de los dos penales de Victor Genes. Todavía faltaban 6 goles (ABC Color)
El primero de los dos penales de Victor Genes. Todavía faltaban 6 goles (ABC Color)

Aquella tarde del jueves 30 ya todo daba a indicar que se estaba preparando una gran farsa. Al minuto de iniciar el juego convirtió Raúl Vicente Amarilla. Como para quitarse ya todos los goles de encima convirtieron 5 goles en los primeros 10 minutos, de esos 4 de ellos entraron en solo 5 minutos y cobraron 2 penales para Sol en 4 minutos. Tras esta ráfaga de goles el partido ya iba 3 a 3, quedando a solo 3 goles del objetivo.

En el segundo tiempo continuaron a romper las redes rivales, con un gol de Olimpia por parte de Carlos Torres, luego Victor Genes convertiría su cuarto gol de la noche (más de lo que convirtió la selección sub 20 a su mando) y Hugo Brizuela puso el quinto que sellaba el marcador.

Todo el partido se jugó a ritmo de entrenamiento, como si ninguno de los que estaba en el campo de juego temía quedar fuera de la competencia. Ya cuando el resultado estaba asegurado casi convirtió un gol Alejandro Cano, ídolo solense con gran técnica y categoría. Al pasar esto Cano tuvo que pedir disculpas a Ever Almeida por haber puesto en peligro el marcador. El propio Osvaldo Dominguez Dibb estaba en las preferencias haciendo bromas con las personas alrededor, como si su equipo no estuviera perdiendo frente a sus ojos.

Protestas y nuevos enfrentamientos

Los equipos chilenos inmediatamente pidieron impugnar el partido ante la Conmebol, alegando que fue un cotejo “descaradamente arreglado”. Para entender la rareza del resultado, un resultado de 5-4 solamente se había dado en 2 de los 1.974 partidos jugados en la Copa Libertadores anteriores a aquel infame 29 y 30 de marzo. Los diarios paraguayos le dieron el título del “Partido de la vergüenza”, ABC tituló “Olimpia y Sol transaron”, para que no haya duda sobre lo que ocurrió. La Conmebol analizó el partido y decidió archivar la impugnación el 20 de abril, permitiendo a ambos equipos continuar en la Copa.

Muchos hinchas estaban a favor de la "victoria paraguaya" (ABC Color)
Muchos hinchas estaban a favor de la “victoria paraguaya” (ABC Color)

La opinión pública estaba dividida entre los que hablaban de un arreglo bochornoso y los que pensaban que era una “víctoria paraguaya” y que finalmente eramos nosotros los que perjudicábamos a alguien y no al revés.

Como si las fuerzas del karma hubieran exigido recomponer el daño, Olimpia y Sol tuvieron que verse las caras nuevamente en Cuartos de Final, esta vez si obligados a eliminarse entre sí. El primer partido lo ganó Olimpia 2-0 y en el segundo dieron muestras que eran equipos que podían muchos goles sin importar el partido que sea, brindando a sus hinchas un espectáculo emotivo y memorable que terminó 4-4, decretando así el avance de Olimpia a las semifinales.

El Decano llegó hasta la final aquel año, donde enfrentaron al Atlético Nacional de Medellín. La final también estuvo cargada de cuestionamientos, especialmente el partido de vuelta, donde se denunció que Pablo Escobar había comprado el partido y amenazado al árbitro y a los jugadores olimpistas para que el equipo colombiano gane el partido. Finalmente Olimpia no pudo vencer en la tanda de penales que terminó 5 a 4, al igual que aquel partido que le dio la clasificación. Su decepción duró poco, porque aquel inolvidable plantel obtendría la Libertadores al año siguiente.


Nunca se pudo demostrar que el partido estuvo arreglado, hecho que siempre negaron tanto dirigentes y jugadores. Hace algunos años reflotó la polémica cuando Sergio Markarián habló del partido y dijo “éste claramente es un hecho del que no me enorgullezco, y del que me quiero librar.” El árbitro Barrientos también mencionó que con el tiempo se dio cuenta que todo había estado arreglado, pero sin ninguna prueba concreta. La mayoría de los jugadores lo sigue negando hasta hoy.

Lo único cierto es que nunca se podrá quitar el manto de dudas que cubre a aquel partido jugado hace 28 años. La combinación de hechos supuestamente fortuitos y las coincidencias hablan por si mismas. Aunque haya beneficiado a dos equipos paraguayos, el partido nunca dejará de ser una gota más en la corriente de hechos vergonzosos que han inundado la historia de nuestro fútbol local.

Fuentes: 1989, Un Oportuno Apagón – ABC Color, Y sí, el “Sol 5-4 Olimpia” en la Copa del ’89 fue un arreglo – Diario Última Hora, Diario ABC Color del 29, 30, 31 de marzo, 22 de abril de 1989

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Juan Pablo Zaracho

Como jugador, un buen lector de libros.

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