No es fácil cambiar la mentalidad de victimas a victimarios en solo 3 días como hizo Paraguay entre los partidos contra Argentina y Jamaica. De ser el equipo que sería pasado por encima por los galácticos albicelestes ayer debían ser las estrellas que obtengan una victoria contundente contra el equipo que ni debía haberse presentado en la Copa América. Al final el resultado en Antofagasta fue uno positivo para la Albirroja, que llega a la última fecha con la clasificación casi asegurada.
Estos fueron los puntos más importantes del partido de ayer contra Jamaica:
El ataque de talento de Duwayne Kerr
En el partido pasado hablamos sobre la suerte que acompañó a Paraguay en ciertos pasajes del partido con Argentina. Esta vez el destino se encargó de entregar la carta de la vergüenza pública a Duwayne Kerr, el arquero jamaiquino. Un pelotazo que parecía inofensivo era la situación que debía resolver Kerr, quien eligió la opción donde quedaría como el arquero “moderno”: sacar la pelota con la cabeza.
El problema fue que, gracias a su vasta experiencia cabeceando en defensa, apuntó el cabezazo hacia abajo, justo a la rodilla de Edgar “Pájaro” Benitez, haciendo que la pelota ruede lentamente, casi burlandose del arquero, hasta cruzar la línea.
Los pesos pesados del mediocampo
La dupla Topo Cáceres-Néstor Ortigoza se va afianzando como el cimiento de todo el juego colectivo de la selección. Con el “Topo” se ofrece la protección a la línea defensiva y comienza la recuperación de la pelota. Fue el propio Cáceres quien recupera la pelota y tira el pelotazo en el gol de Paraguay. De tan bien que estaba jugando, hasta se animó a meter algunos enganches y tiros al arco, como si estuviera poseeído por el espíritu de Andrés Iniesta.
Mientras el “Topo” recupera la pelota y da destellos de su talento escondido, el metrónomo del equipo es Ortigoza. Cada salida con pelota dominada necesariamente tiene que pasar por sus pies para poder llevar peligro al arco rival. Sus pelotazos no son misterios por develarse cuando la pelota cae, sino que son misiles teledirigidos al pie del receptor. Cuando dejó de manejar los tiempos como en el primer tiempo, el equipo empezó a sufrir de sobremanera.
https://youtu.be/9k_GOYPIjVU?t=34m5s
Irónicamente, Ortigoza es el encargado de ensanchar la cancha para la Albirroja, distribuyendo la pelota del medio hacia las puntas. Esto fue aún más notorio en este partido, tomando en cuenta que los jamaiquinos nunca lo presionaban en la salida, permitiendo que distribuya sin inconvenientes. Si es que no encuentra lugar en el mediocampo, busca cualquier espacio abierto disponible con tal de tener control de la pelota, como en esta jugada, donde parece ser más un lateral izquierdo que un volante central:
Las pelotas paradas son el momento donde cada uno demuestra lo mejor de sus capacidades: Ortigoza se encarga del centro perfecto a la cabeza del compañero y transformar en realidad los trazos esbozados en el pizarrón de jugadas preparadas de Ramón Díaz, mientras que “Topo” utiliza su altura y voluntad para ganar en el área y buscar el gol. Esta conexión se transformó en un gol ayer, pero Cáceres estaba adelantado y fue anulado.
El joven electrizante
El hombre que cambió el destino del partido con Argentina también fue quien más demostró tener el gen de la rebeldía y la gambeta indescifrable. Derlis González se ganó la titularidad en este partido y desde el primer minuto impuso su estilo en cada ataque paraguayo. El recibía la pelota, encaraba, enganchaba, buscaba el espacio e intentaba combinarse con los delanteros. Una típica subida de Derlis se veía algo así:
https://youtu.be/9k_GOYPIjVU?t=22m26s
Muchas veces era superado por la velocidad de los defensores y también en algunos casos terminaba chocando contra un muro de camisetas amarillas. Tal fue la “Derlisdependencia” que las grandes chances albirrojas en el primer tiempo vinieron desde el costado derecho.
Esta dependencia es señal que arriba hay pocas opciones para crear juego. En el segundo tiempo tanto Derlis como el “Pájaro” no tuvieron tanto contacto con la pelota, buscando proteger a la línea de atrás antes que crear situaciones de gol. Las incursiones de González también demostraban que todo el talento que tiene necesita ser canalizado de una manera más eficiente ante equipos que se preparen tacticamente mejor que lo que propuso el equipo africano como diría Edinson Cavani.
Atacar desde el principio
Este partido fue de trámite totalmente contrario al jugado con Argentina: primer tiempo dominante de Paraguay y un segundo tiempo donde levantaron el ritmo y sufrieron hacia el final. El dominio albirrojo en la primera mitad fue absoluto. Esto se reflejó en la cantidad de tiros al arco: 9 a 1. Jamaica nunca se acercó al arco, mientras que Paraguay llegó varias veces con peligro antes del gol de Benitez.
Mientras que con Argentina, los ataques eran esporádicos, ante Jamaica se buscaba presionar a la defensa contraria con números, tal como demuestra esta imagen:
Roque servía como el punto de enfoque de la ofensiva, mientras que Bobadilla recorría el campo, buscando una posición para ayudar a los dos extremos. No siempre fueron muy efectivos en su toma de decisiones, pero demostraron que pueden atacar cuando el rival les da suficiente espacio.
En el segundo tiempo el enfoque cambió después de los primeros 20 minutos, en los cuales convirtieron un gol que fue anulado y donde Miguel Samudio casi arrancó el travesaño de un pelotazo. Al sentir que tenían el resultado en el bolsillo y no verse presionados por ola tras ola de ataques jamaiquinos, el equipo se dedicó a proteger el marcador en lugar de ampliarlo. Por fortuna lo demostrado por Jamaica ayer fue paupérrimo, siendo un tiro de Gareth McCleary lo más cercano que tuvieron de romper el cero en el arco defendido por Antony Silva.
Por esta razón el partido nos lleva a plantearnos las siguientes preguntas para los cotejos que se vienen:
- ¿Podrá Paraguay romper el cerrojo de una defensa bien armada?
- ¿Que alternativas hay cuando un equipo presione los 90 minutos a Ortigoza y González?
- ¿Esta formación será utilizada contra Uruguay o volveremos al 4-5-1 del partido inicial?
Solo Ramón Díaz podrá develar las respuestas a las dudas que quedaron tras los dos primeros partidos. Ahora queda el partido con Uruguay, al cual Paraguay puede llegar clasificado si se dan ciertos resultados. Esto les permitirá jugar sin presión, por ende permitirá que se busque el mejor nivel de juego en lugar de simplemente obtener un resultado a base de pelotazos y garra.
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