Martes de noche, prácticas intensas de Diego Barreto antes de volver a vestir la número 12, entonces un grupo de pysatroncos lo interrumpe para un programa radial y lo que estaba pensado como una breve nota con el arquero de Cerro Porteño se convierte en una nota al titular del Club Cerro Porteño, por solo atajar un teléfono celular… ¿qué pasó aquí?
A Barreto se lo escuchaba muy emocionado por volver a vestir la camiseta de Cerro en el presente de la institución con un fuerte campeonato local y la presencia en la Libertadores. “Antes de ser jugador de Cerro soy hincha del club”, nos contaba Barreto para luego definirse como uno de los jugadores que “le mete onda” en el vestuario para estar siempre de buen humor a pesar de la adversidad.
Cuando @Mharcos ya lo despedía y le extendía la invitación para concretar una entrevista más extensa, Barreto se cruzaba con Zapag. “Presi, acá hay unos amigos que te quieren saludar” dijo y luego el teléfono pasó a manos del titular del club azulgrana.
“Hola sí, Diego se va a la práctica”
Y así fue que Zapag habló un ratito con CChRadio, y la pregunta obligada fue sobre sus inicios en el fútbol, no como el dirigente que conocemos en la actualidad. Comenzó en el colegio, jugó un poco en la facultad, y ahora vive de uno de una de sus pasiones. En su casa tiene una cancha sintética y cuando tienen oportunidad, tíos y sobrinos juegan y Zapag se luce de delantero, contó.
“Juego de delantero goleador nato, número 9. Es el puesto donde más se nota cuando el jugador no está teniendo el rendimiento apropiado, es el puesto de mayor responsabilidad”, dijo el presidente de Cerro para luego añadir, como una definición actual: “Hoy el delantero tiene que jugar de espalda, tiene que pivotear, tiene que bajar un poco, tiene que tener mucho resto y mucha marca en sí”.